La carcasa de la caja de cambios se produce mediante fundición por presión de aleación de aluminio. El producto tiene una alta precisión y una superficie lisa, pero en los bordes y orificios se forman barbas y rebanadas, que necesitan ser pulidas y afiladas. Por lo tanto, se adopta un proceso de revoque que combina revoque grueso y limpieza. El revoque grueso utiliza una máquina vibratoria de revoque y pulido, y se utiliza un abrasivo de resina cónico con fuerza de corte media para el revoque grueso. El ángulo afilado de la piedra abrasiva puede penetrar en ranuras, esquinas y paredes interiores para lograr el efecto de eliminar barbas y rebanadas.

Para la limpieza, se utiliza una máquina vibratoria de revoque y pulido. El abrasivo empleado es un material de revoque preciso sin fuerza de corte: un abrasivo de porcelana alto-aluminosa cilíndrica oblicua. El abrasivo tiene una gran densidad específica y ejerce un efecto de pulido y brillo, lo que permite reducir adicionalmente la rugosidad superficial.

Con el fin de mejorar la resistencia anticorrosiva del producto después de su exposición al agua, se utiliza una secadora vibratoria después del pulido, y se emplea un abrasivo de mazorca de maíz para absorber la humedad y secar la humedad presente en las superficies interior y exterior.